Las enfermedades infantiles
Aunque algunas enfermedades
reciben el nombre de enfermedades propias de la infancia, porque son muy
frecuentes en los niños, también pueden padecerlas las personas mayores. Muchas
de estas enfermedades son producidas por virus. En la mayor parte de los casos
son leves, duran unos días y son bastante contagiosas.
Algunas de las enfermedades
infantiles más frecuentes son el sarampión, la varicela, la rubéola, la tos
ferina o la bronquiolitis.
VARICELA
¡Cómo pica! La varicela
es una enfermedad muy frecuente en los niños pequeños. Es muy contagiosa y está
causada por un virus.
La varicela puede empezar
con un poco de fiebre y, uno o dos días después, aparecen, en el tronco o en la
cara, unos pequeños puntitos rojos que pican mucho. Estos puntitos se
transforman enseguida en vesículas, una especie de granitos que contienen
líquido.
Las vesículas se extienden
al cuero cabelludo, la boca, los brazos y las piernas. Poco a poco, se secan y
se transforman en costras. Es muy típico que puedas observar a la vez manchas,
vesículas y costras, porque no todos los puntitos rojos aparecen al mismo
tiempo. La varicela suele durar de una semana a diez días. Cuando ya todas las
vesículas se han transformado en costras, la enfermedad no es contagiosa.
Es importante mantener
las lesiones limpias y secas, así como cortarse las uñas y no rascarse, ya que
las pequeñas heridas producidas por el rascado se pueden infectar y dejar
pequeñas cicatrices.
SARAMPIÓN
El sarampión es una enfermedad
muy contagiosa producida por un virus. Puede empezar como un catarro que afecta
a la nariz y a los ojos, con tos seca y fiebre. En ese momento, se pueden ver
dentro de la boca algunas manchas de color rojo con un punto blanco en el
centro. Dos o tres días después, la fiebre sube mucho y aparecen unas manchas
redondeadas detrás de las orejas y en la raíz del pelo. Poco a poco, las
manchas se extienden por la cara, el cuello, el tronco, el abdomen y las
extremidades. Después de cuatro o cinco días las manchas desaparecen.
RUBÉOLA
La rubéola es una enfermedad
leve y contagiosa, producida también por un virus. En la cara aparecen manchas
parecidas a las del sarampión, pero más pálidas y más pequeñas, que se
extienden con rapidez al resto del cuerpo. Es típica la presencia de ganglios
de gran tamaño detrás de las orejas, en el cuello y en la zona posterior de la
cabeza. La enfermedad se cura, aproximadamente, a los cuatro días.
Aunque es una enfermedad
benigna, puede tener consecuencias muy graves si la padece una mujer embarazada,
ya que puede afectar al feto y producir malformaciones.
PAPERAS
Las paperas o parotiditis
es una enfermedad muy contagiosa, producida por un virus, que afecta a las
glándulas parótidas. Se trata de dos glándulas que producen saliva, cada una de
las cuales se sitúa al lado de cada oído. Esta zona duele y se hincha mucho;
son las glándulas parótidas que se inflaman. La mayoría de las veces se afecta
un lado, y unos días después, el otro.
TOS FERINA
La tos ferina es una enfermedad
producida por una bacteria, que afecta a las vías respiratorias.
Comienza como un catarro y se caracteriza por una tos muy ruidosa. Dura entre 6
y 10 semanas y puede ser grave en niños muy pequeños.
VACUNAS PARA ESTAS ENFERMEDADES
Las vacunas te proporcionan
defensas y evitan que padezcas ciertas enfermedades. Desde que naces hasta los
catorce años, recibirás varias. En el calendario de vacunaciones se señala la
edad y el tipo de vacunas que se deben administrar. Algunas son para evitar
enfermedades muy frecuentes en los niños. La vacuna de la tos ferina te protege
contra esta enfermedad, y la de la triple vírica, contra el sarampión, la
parotiditis y la rubéola.
BRONQUIOLITIS
La bronquiolitis es una
enfermedad respiratoria producida por un virus, en la que se produce una inflamación
de los bronquios más pequeños. Suele afectar a niños menores de dos años. Al
principio aparece catarro, fiebre y tos. Después, la inflamación y la
obstrucción de los bronquios pequeños provocan dificultad para respirar.
LOMBRICES BLANCAS (OXIURIASIS)
Es posible que alguna
vez hayas tenido lombrices. No te preocupes, es una infección muy
frecuente y sin importancia. Las lombrices son pequeños gusanos blancos
alargados. Al tomar agua o alimentos contaminados, o llevarnos las manos sucias
a la boca, podemos introducir los huevos, que luego se convierten en gusanos,
en el intestino. Estos gusanos ponen sus huevos cerca del ano. Puedes sentir
picor y estar algo nervioso.
Existen fármacos que eliminan
las lombrices por completo. Además, para evitar este tipo de infecciones es
importante tomar algunas precauciones, como lavarse las manos después de ir al
cuarto de baño o no llevarse las manos sucias a la boca.